23 julio, 2005

Cada vez se leen menos libros de textos

Cada vez se leen menos libros de texto

El 38 por ciento de los alumnos de Rosario no leyó un libro completo de estudio en el último año.

MARCELA ISAÍAS.

DIARIO LA CAPITAL (ROSARIO - ARGENTINA)

23-07-2005 :: El 10% de los estudiantes universitarios no leyó ningún libro en el último año. El dato se desprende de la encuesta realizada por el Centro de Administración de Derechos Reprográficos (Cadra) a la hora de establecer el hábito de la lectura entre los estudiantes, sobre todo para conocer la cantidad de libros completos leídos en el último año.Así se supo que el 45% leyó entre 3 y 6 libros; el 23 % entre 1 y 2; el 22% más de seis libros y el 10 % ninguno. También se pidió que discriminaran entre libros de esparcimiento y de estudio: casi el 25 % aseguró no haber leído ningún libro de estudio en el año.

Este último dato se estudió de cerca en las carreras que participaron en el análisis. De manera llamativa surge que más de un tercio (37,5%) de los estudiantes del área agropecuaria, más de una cuarta parte de salud y en económicas, una cifra ligeramente inferior en las áreas sociales y exactas (22,4 % y 22,9 %, respectivamente) y cercano al 10 % en jurídicas no leyeron ningún libro de estudio durante el año.

Y cuando se discriminan estos valores por año de cursado, se nota un leve incremento en los guarismos a medida que avanzan en el cursado de la carrera de grado. Pero -indica el análisis de Cadra- sorprende nuevamente el porcentaje de estudiantes que cursa el último año de su carrera y no leyó ningún libro de estudio (18,8%).

De estos números, también importa lo que sucede con los estudiantes de Rosario: el 38% aseguró no haber leído ningún libro de estudio en el período analizado contra un 19,9% de los de Buenos Aires.

El modo de acceso a los libros leídos fue otro de los temas estudiados por Cadra. El 59 % accede a los libros leídos a través de las compras, el 39 % por medio de préstamos, el 34 % de fotocopias, el 30 % de bibliotecas y un 4 % de internet.

A la sospecha generalizada que la lectura de libros genera hábitos, se suman los datos obtenidos por la encuesta y que afirma que los alumnos que leen más de seis libros años, la mitad de ellos se abstiene de usar fotocopias.También entra en el terreno del debate si la utilización de las fotocopias es sólo una cuestión económica y no cuenta con igual peso el aspecto cultural. Para considerar esta apreciación, basta saber -según el estudio del Cadra- que el 78 % de los estudiantes de Rosario no concurre a leer en bibliotecas (el 67 % no lo hace en Buenos Aires). De todas maneras, es importante saber que el trabajo de Cadra invita a preguntarse sobre cómo la cantidad y calidad de bibliotecas que hay en el ámbito de la educación superior contribuyen a este comportamiento.

En tanto que cuando se clasifica la cantidad de libros que adquieren los estudiantes según se trate de textos de estudio o de esparcimiento, aumentan significativamente los valores referidos a libros de estudio. Además que en la razones que motivan estas compras juegan un rol decisivo la opinión o sugerencia de los profesores: el 67,5 % lo hace porque se lo recomendó un docente. El 15,4 % lo compró en una feria y un 23,3 % por gusto o interés.

 

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